Happy End
o, lo que es lo mismo: No es una película sobre masajes.
Le quisieron poner: ¿con o sin?
Pero le terminaron poniendo: Final Feliz.

Cinco años tuvieron que pasar para que el ultra realista Michael Haneke entregara su nueva película. Interesantes planos fijos (largos, como suele ser él) aborda la soledad, desesperación y búsqueda de cada integrante de una familia adinerada francesa que en todos aspectos es disfuncional.
Bien cuidada, elegante, no es tan cruel como White Ribbon, La Pianista o Funny Games, aunque tiene su lado desolador.
Gran reparto, súper actuaciones, de todos. 
Secuencias largas muy interesantes y Bien logradas.
Rate: 10

A destacar la actuación de la adolescente Fantin Harduine, de 13 años, que logra transmitir su desolación al vivir dentro de una familia poco o nada expresiva o cariñosa y cómo transmite sus miedos, neurosis y trastornos.

El veterano actor Jean Louis Trintigant, que trabajó con Haneke en Amour, relata en la película a su nieta cómo cuidó de su esposa por años hasta que finalmente la asfixió. Aunque no se trata directamente de una segunda parte de la genial Amour, sí se trata del mismo personaje.